Las tradiciones extremeñas han encontrado un hueco en nuestros días. Muchas de ellas han adquirido un carácter festivo que les hace más atractiva para los visitantes. Sin duda, su un motivo para visitar Extremadura, aprovechando a su vez para descubrir la gastronomía, historia... A continuación destacamos algunas de ellas, tanto de Interés Turístico Nacional como de Interés Turístico Regional. Pincha en cada foto para poder vivir un cachito de cada una de ellas.
FIESTA DEL CEREZO EN FLOR
Se da en marzo en el Valle del Jerte, norte de Cáceres, cuando comienza la primavera y los cerezos empiezan a dar sus primeros coletazos, vistiendo de blanco todo el valle. Es una fiesta considerada de Interés Turístico Nacional.
Miles de cerezos en flor cubren sus ramas con pequeñas florecillas blancas, que forman un manto espectacular creando un paisaje espectacular. Paralelamente, se hacen otras actividades comunes a la comarca como rutas senderistas o marchas ciclistas.
EL JARRAMPLAS
El Jarramplas es una fiesta de Interés Turístico Nacional celebrada en Piornal, en el Valle del Jerte. Tiene lugar los días 19 y 29 de enero porque es el personaje que acompaña a San Sebastián en la iglesia.
Representa el triunfo del bien sobre el mal, el mal reencarnado en el Jarramplas es castigo por los piornaleros abucheado con nabos. Es decir, un símbolo que odiamos y por ello, lo queremos dejar atrás.
En esta celebración por ser de carácter religiosa se besa los pies al santo, hay procesiones... Además, se realizan concursos y comidas en conjunto, sin olvidar por supuesto, el momento del personaje principal, el Jarramplas.
CHÍVIRI
El Chíviri es una fiesta de Interés Turístico de Extremadura que se celebra en la Plaza Mayor de Trujillo, cada domingo de Resurrección.
Surge a principio del siglo XIX con la fiesta de la primavera para celebrar la llegada del buen tiempo con el cambio de estación. Así, la gente salía a la calle y se reunía en la Plaza Mayor.
A los pies de la estatua de Pizarro, los trujillanos pasan el día y bailan las canciones populares vestidos con el traje típico extremeño, el refajo; y un pañuelo rojo atacado al cuello.
EL ALCALDE DE ZALAMEA
El Alcalde de Zalamea, fiesta de Interés Turístico Nacional, es una fiesta popular basada en la representación de una de las obras más importantes del Siglo de Oro de Calderón de la Barca.
Los vecinos de Zalamea de la Serena interpretan esta obra y trabajan en ella durante todo el año, hasta que en la segunda quincena de agosto la representan. Además, recrean un mercado artesanal e infantil en el castillo y en las calles, puedes encontrarte a todo tipo de personajes de la época, así como ciegos, trovadores, lazarillos...
FOLKLORE EXTREMEÑO
El folklore engloba estilos de baile y es diferente en la baja y alta Extremadura, ya que no ha evolucionado igual en ambos lados. Entre las danzas más destacadas tenemos las jotas, como la jotilla popular de Olivenza "La uva"; y los fandangos, como "las canciones de coro" en la fiesta del Chíviri.
Por otro lado, Extremadura cuenta con instrumentos caseros como el almirez, la botella de anís, los cencerros o el tamboril. Todos estos acompañados de guitarras, laudes...
Finalmente, hablamos del traje regional, siendo este diferente para hombres y mujeres. Los hombres visten traje negro de pana lisa ribeteado de cuero y banada; mientras que la mujer viste un refajo de anchas franjas de varios colores, un mantón bordado.
El folklore es motivo de celebración, por lo que se baila en todas las fiestas. También, existen asociaciones que ganan dinero realizando espectáculos por toda la región e incluso por España. Así, se difunde y enriquece la cultura extremeña.
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